TikTok es un fenómeno y, según el gobierno de Estados Unidos, también es un gran riesgo. La aplicación le ha dado a su casa matriz, ByteDance, una valuación de 220,000 millones de dólares y su ritmo de crecimiento, particularmente entre jóvenes, ha puesto a competidores a reformular sus propios conceptos de videos verticales.
Pero la perspectiva gubernamental es muy distinta en Estados Unidos y Canadá. Ambos países han vetado a la aplicación de los dispositivos de gobierno por considerarle como un potencial riesgo de espionaje por parte de China. En la escalada más reciente, el gobierno de Estados Unidos demandó a propietarios de TikTok en China a que vendan sus participaciones, según le dijeron fuentes a Bloomberg.
La demanda provino del Comité de Inversión Extranjera en Estados Unidos. El hecho de que exista la “petición” quiere decir que Estados Unidos habría renunciado por completo a una revisión de seguridad exhaustiva de la aplicación para descartar los temores de posible espionaje.
La opción sí está sobre la mesa, aunque es el último recurso, según le dijo una fuente de TikTok a Bloomberg. No es un escenario ideal porque, a decir del portavoz de TikTok, Brooke Oberwetter, una desinversión por parte de los propietarios chinos no resolvería las dudas de seguridad que hay sobre la aplicación. Claramente el gobierno de Estados Unidos no piensa así: sin dueños chinos, la app no tendría que verse obligada a dar su información al gobierno chino.
Lejos quedaron los puntos medios, como aquel abordado en el proyecto Texas para que Oracle se encargara de alojar en suelo estadounidense los datos de los usuarios nacionales. Ese proyecto establece que Oracle revise software de TikTok y haga un monitoreo activo del tratamiento de datos. La nueva demanda del gobierno estadounidense es una escalada en los niveles de desconfianza y dejaría obsoleto el proyecto Texas que TikTok ha impulsado como herramienta para transparentar sus operaciones.
No es la primera vez que se habla de una venta de TikTok para que Estados Unidos esté completamente seguro de que no hay espionaje en dispositivos de sus ciudadanos. Esa propuesta se puso sobre la mesa cuando Donald Trump era presidente, pero el presidente Biden interrumpió el proceso para hacer una revisión de las medidas impuestas. En pocas palabras, los dos años de puntos medios y potenciales negociaciones están muy cerca de fracasar oficialmente.
Según las fuentes de Bloomberg, la venta de parte de TikTok solo se perseguirá si las negociaciones entre la app y el gobierno estadounidense no avanzan, lo cual parece estar sucediendo. Según analistas de Bloomberg no hay muchas empresas tecnológicas que podrían estar interesadas en comprar TikTok. La única posible interesada podría ser Microsoft, especialmente con su nuevo auge con ChatGPT y la competencia que quiere ser para el buscador de Google.
Con ese enfoque, Microsoft bien podría considerar adquirir una plataforma de video para ser activamente competidor de YouTube.