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China informó el domingo de su mayor número de nuevas infecciones por COVID-19 en seis meses, un día después de que las autoridades sanitarias dijeron que seguirían con los estrictos controles contra el coronavirus, lo que probablemente decepcionó las recientes esperanzas de los inversores de que se produjera una relajación.
China registró el sábado 4.420 nuevos contagios de COVID-19 de transmisión local, según la Comisión Nacional de Salud, la mayor cifra desde el 6 de mayo y en comparación con los 3.659 nuevos casos locales del día anterior.
Aunque el número de casos es extremadamente bajo en comparación con el resto del mundo, China ha mantenido un enfoque de cero COVID durante casi tres años de pandemia, que incluye confinamientos, cuarentenas, pruebas frecuentes y una drástica reducción de los viajes al extranjero.
En una conferencia de prensa celebrada el sábado, las autoridades sanitarias reiteraron su compromiso con el enfoque de “remoción dinámica” de los casos de COVID tan pronto como aparezcan.
Las medidas chinas contra el COVID son “completamente correctas, así como las más económicas y eficaces”, dijo el funcionario de control de enfermedades Hu Xiang. “Debemos ceñirnos al principio de dar prioridad a las personas y a las vidas, y a la estrategia más amplia de evitar las importaciones del exterior y los rebotes internos”.
Las acciones chinas se dispararon la semana pasada ante los rumores de una posible flexibilización de las restricciones por el COVID, y los informes de los medios de comunicación de que podrían producirse pronto algunos ajustes en la política.
Sin embargo, muchos analistas han afirmado que no esperan que se produzca una flexibilización significativa hasta después de la sesión parlamentaria anual de China en marzo.
Los analistas de Goldman Sachs dijeron que el anuncio del sábado mostraba que “el gobierno todavía necesita mantener su política de cero COVID hasta que se hayan hecho todos los preparativos”. En nuestra opinión, esto puede llevar unos meses”, escribieron, diciendo que su expectativa “de referencia” era la de una reapertura en el trimestre de abril-junio.
La ciudad meridional de Cantón siguió informando de un aumento de las infecciones, con 66 nuevos casos sintomáticos de transmisión local y 1.259 asintomáticos, frente a los 111 casos sintomáticos y 635 asintomáticos del día anterior, informaron las autoridades de esta ciudad de casi 19 millones de habitantes.
La capital china, Pekín, informó de 43 casos sintomáticos y seis asintomáticos, frente a los 37 casos sintomáticos y cinco asintomáticos del día anterior.
Aun así, el maratón anual de Pekín se celebró el domingo por la mañana bajo estrictos protocolos de COVID, después de haber sido cancelado los dos años anteriores.
Unos 26.000 participantes se inscribieron en la prueba, que comenzó bajo un cielo cubierto de niebla en la céntrica plaza de Tiananmen de Pekín. Los corredores tuvieron que someterse a pruebas de PCR durante los tres días previos a la carrera y no salir de Pekín durante siete días.
