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En el último debate presidencial de 2018, Ricardo Anaya hizo una clara advertencia al entonces presidente Enrique Peña Nieto: “En mi gobierno, enfrentarán la justicia”. Irónicamente, fue el político panista quien terminó investigado durante el sexenio y autoexiliado en los Estados Unidos.
Anaya protagonizó momentos memorables en los debates de la campaña presidencial en la que compitió contra Andrés Manuel López Obrador, José Antonio Meade y Jaime Rodríguez Calderón, el “Bronco”, desde la citada amenaza a Peña Nieto hasta sus enfrentamientos verbales con AMLO.
“Ricky, riquín, canallín”, le dijo López Obrador a Anaya en claro tono irónico sobre sus supuestos actos de corrupción. No se puede olvidar el momento en que el tabasqueño apartó su cartera de su contrincante, como protegiéndola de un posible robo. El golpe visual de tal gesto quedó en la memoria colectiva como un momento chusco y a la vez contundente.
El panista insistió en aquellos debates en que era víctima de un complot gubernamental para minar sus oportunidades de cara a las elecciones. Hay que recordar que en los meses previos a los comicios se ventilaron escándalos de posible tráfico de influencias y enriquecimiento ilícito de Anaya y su familia. Se publicó que sus hijos estudiaban en un colegio privado en Atlanta, lo que no correspondía a sus ingresos como representante popular.
“Tú y tu jefe van a enfrentar la justicia en mi gobierno, porque es lo correcto”, le advirtió Anaya a Meade, quien se había desempeñado como un alto funcionario del Gabinete de Peña Nieto. Durante su sexenio, el titular del Ejecutivo priista estuvo inmerso en una serie de acusaciones por corrupción que lo implicaban personalmente, como la Casa Blanca, una lujosa mansión en posesión de la familia del entonces mandatario, pero a nombre de un contratista ampliamente beneficiado con contratos millonarios.
Además de las acusaciones personales contra Peña Nieto por posible tráfico de influencias, se destaparon casos de desfalco a Pemex con la compra de una planta chatarra a AgroNitrogenados y la llamada Estafa Maestra. Anaya acusó durante los debates a López Obrador de haber pactado con Peña Nieto para garantizar impunidad al priista, lo que rechazó el ex Jefe de Gobierno de la Ciudad de México: “Lo he visto una vez en seis años… ¡no hubo pacto!”, expresó AMLO. Lo cierto es que durante el actual gobierno, se abrieron investigaciones contra altos funcionarios como Rosario Robles y Emilio Lozoya, sin embargo, ninguno llegó a condenas. Otros políticos preponderantes como Luis Videgaray y el propio Peña Nieto no recibieron cargos en su contra.
El que sí fue emplazado por la Fiscalía General de la República a presentarse para ser acusado de cohecho, lavado y asociación delictiva, fue Ricardo Anaya, quien no se presentó en múltiples ocasiones a la audiencia, por temor a ser encarcelado. El panista también fue investigado por recibir sobornos como legislador en el caso Odebrecht. Anaya se autoexilió desde 2021 en Estados Unidos, desde donde realizó continuamente videos en contra del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. En un inesperado regreso a la política y a pesar de tener una investigación abierta en México, Anaya se registró en la lista de senadores de representación proporcional por el PAN.
