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La regidora de Morena en el Ayuntamiento de Chihuahua, Ishtar Ibarra Barraza, solicita de manera urgente al alcalde panista, Marco Antonio Bonilla Mendoza, así como al titular de Servicios Públicos Municipales, José de la Madrid, la separación inmediata de su cargo de Reyna Arellano, con número de empleado 17949, por las acciones cometidas contra brigadistas de Morena el pasado viernes 19 de enero en la colonia Cerro Prieto.
Asimismo, solicitó la intervención inmediata del órgano interno de control, puesto que sin duda esta empleada municipal no cumple con el código de ética y conducta para las personas servidoras públicas y de la política anticorrupción del municipio de Chihuahua.
“Es lamentable ver en medios de comunicación las declaraciones del alcalde, Marco Bonilla, así como de algunos regidores que justifican las agresiones físicas de Reyna Arellano hacia nuestros compañeros y compañeras con temas electorales y partidistas”, indicó la regidora morenista. Esto tras las lamentables declaraciones de un regidor panista en la pasada sesión de Cabildo en la que defiende el actuar de la funcionaria municipal asegurando que su fecha de ingreso fue en la administración de 2010, “recibimos información por parte de un empleado municipal cercano al alcalde Bonilla que no es así y que la fecha de ingreso de esta persona fue el 7 de noviembre de 2018”.
“Por otra parte, también es lamentable que no exista ningún tipo de acción o consecuencia por parte del alcalde, puesto que la policía municipal vio el delito en flagrancia y no detuvieron a la agresora, así mismo salvaguardar la integridad de nuestras compañeras, que al final de cuentas también son ciudadanas de Chihuahua independientemente de los colores y partidos que nos identifiquen”.
Ibarra Barraza hizo hincapié en que un gobierno humanista y respetuoso de los valores éticos, morales y Derechos Humanos, como así lo afirma el alcalde Marco Bonilla cada vez que hace una presentación pública, debe velar porque todos sus trabajadores cumplan el mismo código de ética.
“Pido al alcalde Marco Bonilla la destitución inmediata de esta persona, y que demuestre así el alcalde que su Gobierno es Derecho Humanista y sigue un código de ética, puesto que la señora Arellano no representa el buen trabajo de un funcionario municipal; ahora fueron mis compañeros de partido, después puede ser cualquier otro ciudadano y no podemos permitirlo”.
“Por último, me queda decir que me sorprendió el lenguaje del alcalde, así como de la Gobernadora, en entrevistas. Este hecho tan lamentable ocurrió en su administración en su gestión como representante de las y los chihuahuenses, ¿o del actuar de su funcionaria también le echará la culpa al Gobierno Federal?”.
Los ciudadanos tienen derecho a la paz, el bienestar y la justicia cualesquiera que sean los partidos que los gobiernan; y los gobernantes tienen el deber de coordinarse para servir a estas causas, sin romperse el hocico ni admitir sus responsabilidades.
“Ya estuvo bueno de que las autoridades locales culpen de todo al gobierno federal. ¿Entonces para qué ganaron ese puesto y ejercen el presupuesto? Ni modo que el presidente López Obrador sea culpable de que líderes de un partido corran a pedradas a personas que opinan diferente”, concluyó la regidora de Morena, Ishtar Ibarra.
