REPORTERO1 
La inseguridad en Chihuahua, sobre todo en cuanto a secuestros y homicidios se refiere, son temas en los que nuestras autoridades locales, tanto policiacas como políticas, –presidentes municipales, jefes policiacos y gobernadora– siempre le echan la culpa a la federación para eludir su responsabilidad, mientras la cifra de homicidios y secuestros sigue siendo constante y a la alza.
Incluso cuando les preguntan por qué tantos homicidios, secuestros y desapariciones, fácilmente se lavan las manos con el argumento de que son producto de la delincuencia organizada.
Tras cuatro días como desaparecido, este fin de semana se localizó el cuerpo del profesor Oswaldo García Fontes, en Camargo, Chihuahua; dos días después de que ya no hubo noticias de él, su vehículo fue hallado en Guachochi. Fue el sábado cuando se encontró su cuerpo colgado de un árbol, en la zona de San Francisco de Conchos, en avanzado estado de descomposición.
A este hecho, se suma la ejecución de una pareja la semana pasada por parte de presuntos integrantes del crimen organizado, quienes tras el hecho secuestraron a una menor de un año y tres meses, quien ya está a salvo luego de que se desplegó un operativo para su búsqueda.
Pero estos dos casos en mención son tan solo un triste ejemplo de lo que pasa en el estado, pues en la entidad, son cada vez más frecuentes los secuestros y desapariciones; de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), la privación de la libertad aumentó 77% de enero a julio, con respecto al mismo periodo del año anterior.
Además, el estado ocupa el segundo lugar en la tasa por cada 100 mil habitantes con 0.46, según cifras del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC) en su reporte del primer semestre de 2023.
Mientras que las desapariciones crecieron 63% en lo que va del año con respecto a 2022.
Por si fuera poco, el Departamento de Estado de Estados Unidos actualizó su alerta de viajes y pidió a sus ciudadanos y empleados reconsiderar sus visitas a Chihuahua por delincuencia y secuestro.
La alarma es de nivel tres y fue emitida por las autoridades norteamericanas el martes 29 de agosto, especialmente para Janos, luego de la muerte del director de seguridad pública municipal, Higinio Solís.
Ante el incremento de delitos en el estado, la gobernadora Maru Campos, fiel a su costumbre, argumentó que se trata de un problema heredado y advirtió de la indiferencia de la Federación por abatir la criminalidad, pues poco o nada hacen para enfrentar al crimen organizado.
“La inseguridad no es una situación nueva, es una situación que estamos tratando de cerrar ante la falta de haber trabajado por muchos años, y que además es del ámbito federal. Nos están dejando toda la carga al Estado”, afirmó Campos.
Lo decepcionante para la ciudadanía es que este grave problema va en aumento y el gobierno de Maru Campos cumple el próximo viernes 8 de septiembre 2 años de gestión, y siguen culpando a los gobiernos estatales pasados de todo lo malo que sucede y cuándo pueden continúan culpando al gobierno federal actual.
Por lo visto, no han sido suficientes 2 años para tomar el toro por los cuernos, veremos si le son suficientes los 4 años que le restan, por lo pronto la ciudadanía, que se aguante.
