No funcionó. Twitter ha anunciado el cierre en las próximas semanas de Fleets, una de sus últimas innovaciones, lanzada hace poco más de un año. “Eliminaremos Fleets el 3 de agosto y seguiremos trabajando en algunas cosas nuevas. Lo sentimos… o de nada”, reza el mensaje compartido con los más de 340 millones de usuarios activos de Twitter.
Fleets fue vendida al público como la versión de las historias de Instagram en Twitter. Eran publicaciones que permitían compartir texto, fotos, vídeo e incluso tuits, con la promesa de que desaparecerían de la plataforma al cabo de 24 horas. Una idea originada por Snapchat en 2012 y replicada por casi todas las redes sociales, entre ellas Facebook, Instagram y WhatsApp. La implementación de esta novedad formaba parte de un plan de expansión con el que la plataforma busca crecer, conquistar públicos más jóvenes y ser más rentable. Pero Fleets no ha sido una estrategia ganadora.
El cierre de Fleets, además, cumple con una presea que múltiples expertos en social media han repetido: no necesariamente todo lo que funciona en una red social, triunfa en otra. Por ejemplo, las “historias” son un éxito en Instagram y un fracaso en Twitter.