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Gracias al trabajo realizado por bomberos y policías municipales que conforman la Unidad Especializada en Investigación de Incendios y Explosiones, y quienes recientemente fueron certificados como peritos en esa materia por la Fiscalía General del Estado, 300 casos han sido atendidos y 60 llevados a las instancias investigadoras para recibir una resolución adecuada.
La Dirección de Seguridad Pública Municipal de Chihuahua es la primera corporación preventiva del país facultada para investigar incendios y explosiones, debido al grado de profesionalización alcanzado por los elementos investigadores en los últimos años, al insertarse dentro del Nuevo Modelo de Policía, que les permite dar seguimiento a delitos relacionados a conflagraciones, en colaboración con la Fiscalía Estatal.
Con la conformación de esta unidad, que desde su inicio ha estado liderada por el bombero segundo, Margarito Barboza Ayala e integrada por 2 policías y 2 bomberos criminólogos y abogados, ahora las indagatorias al respecto son más agiles y expeditas.
Fue en junio del año 2022 cuando los miembros del equipo iniciaron de manera formal sus actividades, acciones que se derivan de la colaboración y comunicación que existe entre las corporaciones de los diferentes niveles de gobierno, en esta ocasión entre la Fiscalía General del Estado de la Zona Centro y la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
Entre sus funciones está la elaboración de dictámenes oficiales para determinar el origen de algún siniestro donde se involucra el fuego, en los casos en los que el Ministerio Público considera necesaria su participación, a través de un oficio de colaboración en apoyo a los peritos de la dependencia estatal, que tendrán en dicho documento una base real para desarrollar la investigación final.
Al suscitarse una conflagración, los uniformados inician las indagatorias bajo estrictos protocolos, permitiendo obtener un sustento sólido para deslindar responsabilidades a quien o quienes pudieran estar involucrados en el incidente.
“Nuestro trabajo consiste en realizar peritajes para determinar el origen de las causas de incendios o explosiones, en aquellos casos donde se presume que hubo intencionalidad de una o varias personas, con el objetivo de brindar justicia y reparar el daño a las víctimas”.
“Por ejemplo, se presentó un caso en el cual una persona afectada de sus facultades mentales prendió fuego a varias propiedades de la zona centro y logramos que su familia a través del Ministerio Público, pagara los daños a los propietarios. En otro hecho fue posible la detención de un hombre, al parecer responsable de incendiar un automóvil de manera intencional, pues encontramos restos de un líquido acelerante que se utilizó para cometer el delito”, expresó Barboza Ayala.
