Dos hombres fueron detenidos después de que policías descubrieran una casa que funcionaba como almacén de refrescos clonados de marca Coca-Cola en la alcaldía Iztapalapa, Ciudad de México (CDMX).
Lo que más te sorprenderá son los detalles dados a conocer por la Fiscalía General de Justicia (FGJ). ¿Cómo clonaban Cola-Cola en México? ¿Es cierto que ganaban hasta 12 mil pesos al día con basura?
A lo que entraste a esta publicación, no sabemos si tenían la fórmula secreta del refresco norteamericano, pero sí cómo conseguían todo lo necesario por disfrazar el producto y hacerlo pasar por original.
Lo envases eran conseguidas en negocios dedicados a la compra y venta de plásticos, mientras que las tapaderas o fichas eran obtenidas con recolectores de basura.
Aunque te parezca asqueroso, si frecuentas zonas como puestos ambulantes en CDMX, la Central de Abastos, Chalco y Nezahualcóyotl en el Edomex, es altamente probable que en algún momento compraras una Coca-Cola pirata.
Cabe destacar que hasta ahora no se conoce cómo hacían que las tapas parecieran totalmente nuevas.
Aunque la clonación de cualquier artículo es un delito que podría representar un riesgo a la salud en algunos casos, como este, los operadores del negocio tenían alrededor de 10 trabajadores según la versión de vecinos de la colonia Santa Martha Acatitla Norte, publicada por Aristegui Noticias.
Algunas de las actividades que realizaban serían estas: lavadores de botellas, embazadores, selladores, transportistas y encargados.
El emprendimiento ilegal marchaba bien, según las investigaciones cada caja con refrescos se vendía entre los 200 y 210 pesos en promedio. Si vendían alrededor de 50 a 60 tenían ingresos diarios de entre 10 mil y 12 mil pesos.
300 mil pesos al mes en el peor de los escenarios.