Ubicados en Chivilcoy, los primeros dos motores Scania a Biogás serán utilizados para el emprendimiento agrícola ganadero San Lino Agropecuaria SA, y significa una enorme apuesta de economía circular, ya que se obtiene el biogás de materia orgánica. Por un lado, comienza con la siembra de la semilla para convertir en alimento de los animales, luego se trabaja con la materia fecal, que se introduce a uno de los biodigestores. Al terminar el proceso el biogás que se obtiene se transforma en electricidad a través de los grupos electrógenos con motores Scania de la línea Green Efficiency.
A su vez, los desechos del biodigestor vuelven a la tierra como fertilizantes naturales. “Esos son los mismos elementos que usa la planta para crecer, en lugar de comprar fertilizantes fósiles. Ese es el concepto de economía circular”, explicó Jaime Goodall de San Lino Agropecuaria SA.
Según Leandro Hernández, director de Servicios de Scania Argentina, los motores para esta finalidad pueden ser de 9, 13 o 15 litros. “Son del tipo ciclo otto, trabajan con gas natural a 1500 RPM, generando 50 hertz. Se arman con grupos electrógenos nacionales marca Powgen y el service es realizado directamente por Scania, que cuenta con 28 puntos de servicios en el país preparados para atender este tipo de tecnologías”.
En cuanto a la capacidad de generación de biogás, la obra de San Lino está diseñada para obtener 250 m3 por hora, lo cual es transformado por el motogenerador en 300 kWh de energía eléctrica, que serán ampliados a 500 kW que es lo que la planta puede alimentar de manera constante generando inyección a la red las 24 hs, explicaron desde BGA, constructores de plantas.
Otro dato importante es que el costo de la generación de energía eléctrica a biogás es beneficioso. “La generación a partir del biogás oscila entre 160 y 200 MWh, esto es un 40% más económico que la generación de energía eléctrica en base a gas oil”, comentó Martín Pinos, socio gerente de BGA. “Esto abre la posibilidad para que además de tener un beneficio ambiental por el tratamiento de los efluentes, se pueda reducir el costo de generación eléctrica en áreas rurales”, agregó.
Con estos procesos, y con el motor generador a biogás, en Argentina se pueden disminuir hasta un 90% las emisiones de dióxido de carbono. “Si tomamos todos los grupos electrógenos que están trabajando en el país en generación continua y entregando energía a la red en centrales térmicas, y los convertimos para que se alimenten con biogás de origen animal o de otros efluentes, se podría disminuir la huella de carbono de generación de energía a nivel país”, comentó Hernández.
En ventas, desde la marca ya notan una tendencia clara en la Argentina hacia soluciones más sustentables con las ventas de motores. En este caso, un 15% de lo que comercializan ya funcionan a gas, mientras que en unos 5 años se espera que el mismo porcentaje sea a biogás.