Canadá anunció hoy la reducción de los controles contra el covid-19 en sus fronteras, más de dos semanas después del inicio de una movilización contra estas medidas que generó fuertes perturbaciones, especialmente con Estados Unidos, motivando las críticas internas al primer ministro Justin Trudeau.
“Es hora de ajustar nuestro enfoque. Atenuamos hoy nuestras medidas en las fronteras”, dijo el ministro de Salud, Jean Yves Duclos, quien señaló que dejaba de tener efecto en particular la exigencia de presentar un test PCR para entrar a territorio canadiense.
A partir del 28 de febrero, los viajeros vacunados no estarán obligados a presentar una prueba PCR negativa para ingresar a Canadá.
Ellos “tendrán la opción de usar una prueba rápida de antígeno o una prueba molecular”, y también podrán ser examinados aleatoriamente a su llegada, explicó el funcionario.
Además, “los viajeros completamente vacunados que esperan el resultado de una prueba aleatoria ya no tendrán que ponerse en aislamiento mientras esperan el resultado”.
El gobierno levantó también su recomendación de evitar los viajes al exterior.
“Estos cambios son posibles no solo porque ha pasado el pico de la variante ómicron sino porque canadienses de todo el país están escuchando a científicos y expertos, cumplen las medidas de salud pública y dan pasos para protegerse a sí mismos, a sus familias y a sus comunidades”, afirmó Duclos.
El ministro de Transporte, Omar Alghabra, por su parte, anunció que “se levantará la prohibición de vuelos internacionales a todos los aeropuertos restantes que normalmente reciben vuelos internacionales”.
Paralelamente, el gobierno de Quebec eliminará paulatinamente el pasaporte vacunal.