Si todo va bien, en junio próximo cinco pequeños robots serán colocados en la superficie lunar, los cuales ya están instalados en la nave Peregrine, de la empresa estadounidense Astrobotic, para recorrer los 384 mil 400 kilómetros que separan a la Tierra a la Luna.
Esta será la primera misión mexicana y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) de exploración lunar en la que participarán 200 alumnos, quienes aplicarán la ciencia básica para transformar la realidad, según señaló el rector Enrique Graue.
Colmena es el nombre del proyecto y es la primera etapa de un nicho de tecnología espacial que se quiere desarrollar para que México sea un productor de bienes, riqueza, conocimiento y bienestar, señala el responsable del Laboratorio de Instrumentación Espacial (LINX) del Instituto de Ciencias Nucleares (ICN) de la UNAM, Gustavo Medina Tanco.
Colmena es un conjunto de cinco robots –con menos de 60 gramos de peso cada uno-, 12 centímetros de diámetro y tienen toda su electrónica a menos dos centímetros de la superficie del regolito, que servirán para estudiar la factibilidad de construir estructuras en superficies planetarias, en este caso la superficie lunar.
El enjambre de robots, que tienen una coordinación automática, va a estar navegando para conectarse electrónicamente y ensamblar un panel solar a fin de generar energía eléctrica, y servirá para medir la dinámica del regolito lunar, como temperatura, sedimentación, etcétera.
La misión plantea que los robots actúen de forma autónoma y, tomando como ejemplo a la naturaleza, demuestren que en forma coordinada pueden ser los exploradores y mineros del espacio.
Colmena surgió del Fondo Sectorial entre la Agencia Espacial Mexicana (AEM) y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, y lo está llevando el Instituto de Ciencias Nucleares, apoyándose en estudiantes de especialidades como ingeniería, actuaria, química y geología.
La misión se inició en 2016 y se iba a lanzar el año pasado, pero por retrasos por la pandemia se movió para este año.
Se tiene una ventana de lanzamiento para junio, pero puede cambiar porque las ventanas de lanzamiento dependen de varios factores, como la demanda de vuelos o el clima, aunque se tiene contemplado que sea este año, afirmó el director de la AEM, Salvador Landeros, en una entrevista con Forbes.
Respecto a la inversión del Colmena, Landeros dijo al medio que los robots tuvieron un costo de alrededor de 6 millones de pesos y el lanzamiento alrededor de 7 millones de pesos, los cuales se pagan a la nave que va a llevar los robots, que es Peregrin, que se intañará en el cohete Centauro, que partirá de Cabo Cañaveral, Florida.