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Con el fin de ofrecer a niños y niñas con alguna discapacidad, una mejor calidad de vida y mayor autonomía en distintas actividades, un grupo de docentes de la Unidad de Servicios de Apoyo y Asistencia a la Educación Regular (USAER) 191, de Servicios Educativos del Estado de Chihuahua (Seech), realizó el proyecto denominado “Acuaterapia”.
Esta idea se implementó en el ciclo escolar 2019-2020, antes del inicio de la pandemia por COVID-19, por iniciativa propia de estas profesoras y profesores de Educación Especial, habiendo obtenido hace unos días el Premio al Mérito Educativo otorga el Congreso del Estado mediante un estímulo económico.
Con el seudónimo “Poseidón”, Ana Luisa Otero Carrillo, Dámaris Nájera Vázquez, Maricela Pérez Báez, Karmina Pérez Soto, Adriana Lucía Hernández Rodríguez, Silvia Magaly Pérez Montañez, Norma Lizeth Tarango Miranda, Guadalupe Félix Rosas, Miriam Concepción Hernández Ayala y Mario Arturo Durán Enríquez, planificaron la actividad “Acuaterapia”, que fue reconocida como el mejor trabajo colectivo en el ámbito de la educación.
El objetivo fue contribuir al desarrollo integral de las habilidades de niñas y niños con alguna discapacidad, a través de actividades en la alberca, con el apoyo de su familia.
Estas labores se han efectuado ya por 5 ciclos escolares continuos, y al ver el impacto positivo que se genera en las y los infantes, el equipo buscó compartir la experiencia y tratar de obtener el reconocimiento necesario para su divulgación.
Durante este periodo, se atendió a 30 estudiantes, por espacio de tres meses, con clases extraescolares en la alberca Tricentenario, ubicada al norte de la ciudad.
El docente encargado de la materia de psicomotricidad se enfoca en mejorar la movilidad del cuerpo, además, personal de áreas como Psicología, Lenguaje y Comunicación, Aprendizaje y Trabajo Social, se enfocaba en actividades diversas para reforzar otras áreas de desenvolvimiento, de acuerdo a la necesidad específica de cada estudiante.
De manera alterna también se atendió el aspecto de la autonomía utilizando espacios como los baños y vestidores, en donde tanto estudiantes como padres y madres de familia, les ayudaban a realizar rutinas de aseo personal y cambio de ropa, lo que permitió a las niñas y niños participantes, avanzar en materia de autosuficiencia.
Esto derivó en que sus hijas e hijos pueden ahora efectuar actividades por sí mismos como caminar, correr, comunicarse, además de la mejoría en la relación hacia el interior de las familias.
Actualmente el equipo de trabajo de la USAER 191, atiende a infantes de escuelas de preescolar al norte de la ciudad de Chihuahua y con supervisión escolar de la zona 19 de Educación Especial, esperan en un futuro, cuando las autoridades de salud lo dispongan, continuar trabajando en la realización de este y más proyectos en beneficio de niñas, niños y adolescentes que enfrentan retos por alguna discapacidad y que cursan su educación básica.
