La temprana eliminación de Inter Miami y Lionel Messi en la Primera Ronda de los Playoffs de la MLS a manos del Atlanta United no solo dejó a los aficionados con un trago amargo, sino que representaría una potencial pérdida económica significativa para la liga.
Aunque el futbol suele deleitar a muchos con historias de sorpresas y giros inesperados, el hecho de que el equipo de Messi haya quedado fuera prematuramente es un golpe para los intereses comerciales de la MLS.
Lionel Messi era la gran atracción de estos Playoffs. Desde su llegada, el argentino había revitalizado el interés en la liga, apareciendo en promociones, anuncios televisivos y hasta transmisiones en icónicas locaciones como Times Square. Las expectativas de verlo avanzar en la postemporada fueron un punto central del marketing de la MLS.
Sin embargo, la aventura de Messi y el Inter Miami no duró. Su impacto quedó reflejado desde el primer día, cuando su debut atrajo más de 100 mil suscriptores nuevos al servicio de streaming, con un total de más de dos millones de suscriptores al finalizar la temporada pasada. La ausencia de Messi en las fases finales de la liga se anticipa como un gran golpe para las audiencias.
Incluso, la FIFA había extendido una invitación al club para disputar el Mundial de Clubes tras conquistar el Supporters Shield. Sin embargo, este trofeo quedó en un segundo plano después de su pronta eliminación en la MLS. Los copropietarios de Inter Miami, David Beckham y Jorge Mas, invirtieron alrededor de $70 millones de dólares para convertir al equipo en un referente de la liga, trayendo no solo a Messi, sino también a jugadores como Sergio Busquets, Jordi Alba y Luis Suárez.
Con la temporada finalizada, habrá que esperar hasta febrero para ver de nuevo al Inter Miami, primero en la Concacaf Champions League y después en una nueva campaña de la MLS. El futuro de Messi, mientras tanto, sigue siendo una interrogante.