Una tarjeta de crédito es un producto financiero poderoso, que de usarse correctamente, puede brindar oportunidades que posiblemente de otra manera no podrías tener.
El manejo adecuado de una tarjeta de crédito requiere de una comprensión amplia de cómo funciona, así como considerar aspectos tan importantes como la fecha de corte, el pago mínimo y el costo anual total.
1. Haz un presupuesto
Antes de usar tu tarjeta, define cuánto puedes gastar, porque debes recordar que al final lo que gastes lo tendrás que pagar. Incluso si la institución bancaria te ofrece una línea de crédito alta, no significa que puedas usarla toda sin afectar tus finanzas personales.
Con esto evitarás sorpresas desagradables como grandes pagos y podrás sacarle provecho a tu tarjeta como una herramienta que ayude a manejar tus gastos.
2. Monitorea tus gastos
Debes llevar un control de los gastos para que el manejo de tu tarjeta de crédito no se salga de control. Revisa frecuentemente el estado de cuenta y compara gastos con el presupuesto que estableciste.
Esta medida será útil para que si estás gastando más de lo planeado, tomes medidas antes de que tus deudas se salgan de control.
3. Evita endeudarte
El uso de una tarjeta de crédito conlleva el riesgo de acumular deudas que pueden impactar seriamente en tus finanzas, por lo que es crucial que gastes más de lo debido.
Recuerda que la regla es no gastar más de lo que podrás pagar al fin del mes, ya que esto podría desestabilizar tus finanzas personales.