Rishi Sunak acudió al Palacio de Buckingham, residencia de la familia real británica, para presentar su dimisión como primer ministro, como marca la tradición constitucional, antes de que asuma el poder el líder laborista, Keir Starmer.
Tras abandonar por última vez la residencia del 10 de Downing Street como jefe del Gobierno, Sunak, acompañado por su mujer, Akshata Murty, acudió al palacio para la formalidad de rigor.
Después de la audiencia, el político conservador abandonó el palacio por una puerta trasera, sin ser visto por los medios. Sunak continuará como líder ‘tory’ hasta que la formación inicie el proceso para elegir a un sucesor.
Tras la salida de Sunak fue el turno para Keir Starmer de acudir al palacio que recibir la petición del monarca de que forme el nuevo Gobierno del Reino Unido.
El Partido Conservador sufrió una derrota histórica al perder más de 240 escaños y quedarse con 119, menos del nivel más bajo registrado por esa formación en 1906, cuando sacó 156 escaños.
Keir Starmer, líder laborista británico, fue nombrado oficialmente primer ministro por el rey Carlos III después de la aplastante victoria de su partido en las elecciones legislativas, según una imagen de su encuentro publicada por el Palacio de Buckingham.