El Kremlin dijo el lunes que, si Estados Unidos permitía a Ucrania disparar armas de fabricación estadunidense para atacar el interior de Rusia, significaría una implicación directa de Washington en el conflicto.
Rusia lleva meses diciendo a Occidente el cómo interpretaría tal decisión, y que elevaría el riesgo de una confrontación con la alianza de la OTAN liderada por Estados Unidos.
A la pregunta por las informaciones publicadas por el New York Times y Reuters, según las cuales el Gobierno de Biden había tomado una decisión sobre los ataques de largo alcance, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, señaló que los reportes no se basaban en ningún comunicado oficial.
“Si tal decisión fue efectivamente formulada y llevada al régimen de Kiev, entonces se trata de una ronda cualitativamente nueva de tensión y de una situación cualitativamente nueva desde el punto de vista de la implicación de Estados Unidos en este conflicto”, dijo Peskov.
El presidente Vladimir Putin dejó absolutamente clara la posición de Rusia en su discurso de septiembre en San Petersburgo, dijo Peskov.
Putin dijo el 12 de septiembre que la aprobación occidental de la medida significaría “la implicación directa de los países de la OTAN, Estados Unidos y los países europeos en la guerra de Ucrania”, ya que la infraestructura militar y el personal de la OTAN tendrían que participar en la guía y el disparo de los misiles.