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Los insectos son el terror del hogar, más si son portadores de enfermedades peligrosas tan peligrosas como la rickettsia. La cual pasa de garrapata a ser humano, y puede ser potencialmente mortal para este último.
Aunque hay que señalar que no todas las picaduras de garrapatas acusan la también llamada fiebre manchada de las Montañas Rocosas o fiebre maculosa. Pero si quieres saber si te encuentras en peligro, o no estás del todo seguro del origen de esa lesión, te invitamos a seguir leyendo.
La rickettsiosis no es una enfermedad, sino un grupo de enfermedades infecciosas causadas por bacterias del género Rickettsia, que se transmiten por vectores, principalmente garrapatas, aunque también las pulgas pueden transmitirlas.
En México existen tres especies predominantes, siendo la de mayor impacto la producida por la Rickettsia ricketssi, cuyo principal vector y reservorio es la garrapata rhipicepahlus sanguineus.
Esta garrapata suele hospedarse en los perros. La bacteria que porta causa la enfermedad conocida como la fiebre manchada de las Montañas Rocallosas o fiebre maculosa de las Montañas Rocosas.
Esta puede transmitirse por una picadura, pero también por el contacto directo en heridas abiertas con los tejidos o fluidos de la garrapata, inhalación de aerosoles contaminados y, en menor frecuencia, por transfusión sanguínea.
Otro tipo de bacterias de este tipo, con importancia en México, son la Rickettsia typhi, cuyo vector principal es la pulga de rata y causa el tifus murino, y la Rickettsia prowazekii, cuyo vector es el piojo, hospedado en el ser humano y causa el tifus epidémico.
Sin embargo, el mayor impacto a la salud pública es el de la Rickettsia rickettsi, al que se suman dificultades, como el ser una enfermedad poco conocida, tener síntomas que se asocian a otras enfermedades y que la picadura de garrapata puede pasar inadvertida.
Los síntomas de rickettsiosis, pueden variar dependiendo del tipo de bacteria rickettsia. En el caso de la que causa la fiebre manchada de las Montañas Rocallosas, los síntomas pueden aparecer entre 2 y 14 días después de la picadura, entre ellos se encuentran:
- Escalofríos y fiebre de 39°C o más
- Confusión
- Dolor de cabeza intenso
- Dolor muscular
- Erupción cutánea en muñecas y tobillos, generalmente días después del inicio de la fiebre. Puede propagarse a todo el cuerpo
Asimismo, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, señalan que la infección por Rickettsia rickettsi, también puede provocar diarrea, sensibilidad a la luz, alucinaciones, falta de apetito, náuseas y vómitos, dolor abdominal y sed.
Si presentas estos síntomas, acude de inmediato al médico, en especial si crees haber estado expuesto a garrapatas, por ejemplo, si duermes con tu perro o si estuviste en sitios donde este bicho es común.
Ya que los síntomas pueden presentarse con otras afecciones, suelen requerirse exámenes para confirmar el diagnóstico y tratar la condición a través de antibióticos y la extracción de la garrapata, si permanece adherida.
Básicamente se trata de una enfermedad bacteriana la cual se propaga por medio de las garrapatas infectadas. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la mayoría de las personas que la contraen experimentan fiebre, dolor de cabeza y sarpullido.
En general, especialistas señalan que la infección causada por la Rickettsia rickettsi, suele ser curada por el tratamiento. Sin embargo, aproximadamente el tres por ciento de quienes contraen la enfermedad, muere.
Así es, como explican los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades, si no se trata en su etapa inicial con el antibiótico correcto, la enfermedad puede ser mortal.
De hecho, si no se detecta y trata, puede llevar a complicaciones como daño cerebral, problemas de coagulación, insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal, insuficiencia pulmonar, meningitis, neumonitis y shock.
Por esa razón, es que es muy importante no solo conocer los síntomas y actuar a tiempo, sino reducir el riesgo de picaduras.
Una forma de hacerlo, es cuidar a nuestras mascotas, evitando que salgan a la calle sin supervisión, es decir, siempre deben pasear con correa y evitar que entrar en contacto con animales que pueden tener garrapatas.
De igual modo, es importante bañarlos cada dos o tres semanas con jabones veterinarios, revisar que no tengan garrapatas o pulgas y utilizar un tratamiento antigarrapatas y antipulgas para protegerlos.
Finalmente, ten en cuenta que no tener perro, no te exenta del riesgo. Si llegas a encontrar una garrapata en tu hogar, es mejor fumigar. Busca debajo de los colchones, en la esquina de los techos, en el suelo, detrás de cuadros.
Si vas a pasear al aire libre, puedes usar permetrina en la ropa y calzado, en especial si andarás en zonas con pastos altos y muchos arbustos o árboles. En estos casos es mejor informarse si las garrapatas son comunes, bañarte al llegar a casa y estar pendiente de cualquier síntoma.
Esta infección, en la mayoría de los casos, responde al tratamiento de antibióticos (doxiciclinapreferido), el cual se administra de forma oral. Si la persona se enferma de gravedad se le proporciona esta medicina por intravenosa.
Aunque creamos que las garrapatas y pulgas solo son bichos molestos que afectan a nuestras mascotas, en realidad pueden dañar nuestra salud. Ahora que sabes qué es la rickettsiosis, no ignores los síntomas y abre los ojos para detectar la presencia de estos bichos.
