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El colapso de los mercados financieros, iniciado en Japón este ‘lunes negro’, ha sacudido al mundo económico occidental, particularmente a Estados Unidos.
El índice Nikkei, el principal en Japón, sufrió una caída del 12.4% el 5 de agosto, eliminando en dos días los avances de los últimos dos años. Esta caída ha sido impulsada por la preocupación sobre una posible guerra entre Irán e Israel y la amenaza de una recesión económica en Estados Unidos.
Aunque el impacto comenzó en Japón, pronto se extendió a los mercados estadounidenses, generando un pánico que provocó un desplome generalizado en las acciones, criptomonedas y activos como el oro.
Las siete principales compañías tecnológicas —Microsoft, Nvidia, Apple, Google, Amazon, Meta y Tesla—, que dominan el Nasdaq y representan un tercio del S&P 500, enfrentaron una fuga de inversiones de 520 mil millones de dólares, equivalente a más de 10.1 billones de pesos al tipo de cambio actual. Esta pérdida representa cerca del 40% del Producto Interno Bruto (PIB) de México en 2023, evaporado en un solo día.
Nvidia, la tercera empresa más valiosa del mundo, sufrió una de las mayores caídas, con una depreciación del 6% en el último día. Apple también se vio afectada, con una caída del 3.8%.
En Estados Unidos, la bolsa ha perdido 3.8 billones de dólares en la última semana, alrededor de 74.1 billones de pesos, más del doble del PIB mexicano.
