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El consumo en exceso de ciertos alimentos puede conducir a desarrollar a largo plazo enfermedades mortales para el ser humano, que en ocasiones no se advierten hasta comenzar a padecerlas.
Es de suma importancia, por esta razón, mantener una dieta saludable y equilibrada en función de los nutrientes que necesita el organismo para su correcto funcionamiento.
El consumo responsable, en la gran mayoría de los casos, implica suprimir y reducir la ingesta de determinadas comidas que provocan el aumento del nivel de triglicéridos, un tipo de grasa común en el cuerpo pero que en cantidades excesivas son un riesgo para la salud cardiovascular.
Cabe destacar que durante 2021, aproximadamente 220,000 personas en México fallecieron a causa de problemas relacionados al corazón, según informó la Secretaría de Salud.
De ese total, 177,000 registraron infartos de miocardio, una afección que podría evitarse si se reducen ciertos factores de riesgo, tales como el colesterol.
Las posibilidades de llevar adelante una vida sana son altas para todos aquellos individuos que logren recortar -no prohibir- el consumo de estos cinco alimentos.
Las golosinas y las gaseosas son una rica fuente de azúcares, una cuestión que podría ser perjudicial para la salud sino se consume de manera controlada. Esto implica prestar especial atención en la ingesta que realizan los niños, ya que suelen ser alimentos que les atraen por su sabor.
En caso de conocer que los niveles de triglicéridos en sangre son elevados, la primera bebida que se aconseja quitar de la alimentación diaria es el alcohol. A pesar de las dificultades que representa, teniendo en cuenta que se avecinan las festividades, es necesario darle prioridad a la salud del organismo.
Las harinas refinadas pueden encontrarse en el pan blanco y los pasteles comerciales. Su ingesta diaria en exceso conduce al aumento indiscriminado del nivel de triglicéridos en sangre. El consumo de pan, puede ser un arma de doble filo si no se establecen ciertos controles.
La mayoría de las grasas saturadas se hallan alimentos de origen animal, tales como la carne vacuna, porcina y ovina, así como también en lácteos y carnes procesadas. Reducir el consumo de estas comidas sin dudas contribuirá a disminuir el nivel alto de triglicéridos.
Las comidas ultraprocesadas pueden resultar una bomba de tiempo respecto al aumento del colesterol malo. Entre los alimentos que se recomiendan dejar atrás se destacan las patatas fritas, los snacks, alimentos precocidos, refrescos y zumos envasados.
