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Los vehículos de combate de infantería M2 Bradley proporcionados por el gobierno de Estados Unidos a Kiev son una parte esencial del núcleo táctico defensivo que Ucrania ha adoptado contra Rusia en uno de los puntos más candentes de la línea del frente.
El pasado 10 de octubre de 2023, una poderosa fuerza de 40.000 soldados rusos emprendieron el ataque contra la ciudad acuartelada y defendida por Ucrania de Avdiivka.
El ataque fue la primera oleada de la ofensiva que Moscú lleva intentando realizar en la zona desde hace meses.
Avdiivka es un gran núcleo de ferrocarril y carreteras de la región, lo que le otorga un valor estratégico tanto para Kiev como para Moscú, según explica The New York Times. Capturar la ciudad permitiría a las Fuerzas Armadas de Rusia avanzar mucho más en el Oblast de Donetsk.
Sin embargo, el valor de Avdiivka no es solo militar, sino también político, ya que la ciudad lleva estando en la línea del frente del conflicto con Moscú desde que los separatistas prorrusos de Donetsk buscaran la separación de este Oblast de Ucrania en 2014.
El valor estratégico de la ciudad puede ser la razón por la que Moscú haya sacrificado tantas vidas intentando capturar Avdiivka. Según la información de la inteligencia desclasificada de Estados Unidos, Rusia ha sufrido la pérdida de 13.000 vidas en la lucha por la región.
La zona en la que la lucha es más encarnecida es la región conocida como Stepove, al norte de la ciudad de Avdiivka. Allí, según relata David Axe de Forbes, las tropas rusas se han enfrentado a unas condiciones implacables luchando contra la 47ª Brigada.
Armados con tanques alemanes Leopard 2 y los tanques estadounidenses M2 Bradley, la 47ª Brigada de Ucrania ha utilizado los límites de los bosques a lo largo de la vía de ferrocarril de la región para aislar Stepove del resto del campo de batalla, según señala un analista de guerra.
“A medida que las tropas rusas y sus vehículos salen de Krasnohorivka, cruzando campo abierto, la artillería y los drones ucranianos reducen a sus soldados”, escribía el analista contemporáneo de guerra y aviador de las Fuerzas Aéreas estadounidenses, Donald Hill, según citaba Forbes.
Donald Hill explicó que una vez que conseguían debilitar el ataque ruso, el ejército ucraniano realizaba un contraataque. En estos contraataques se utilizaban los M2 Bradley de la 47ª Brigada, que bombardeaban la línea de árboles de los bosques con fuego de cañón.
