La Oficina de Derechos Humanos de la ONU describió el viernes la “alarmante” situación en Cisjordania bajo ocupación israelí, afirmando que las fuerzas israelíes utilizan cada vez más tácticas y armas militares en sus operaciones policiales.
“Aunque gran parte de la atención se ha centrado en los atentados (de Hamás) dentro de Israel y en la escalada de las hostilidades en Gaza desde el 7 de octubre, la situación en Cisjordania ocupada, incluido Jerusalén Oriental, es alarmante y urgente”, dijo Liz Throssell, portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Dijo que al menos 132 palestinos, entre ellos 41 niños, han muerto en Cisjordania, 124 de ellos a manos de fuerzas israelíes y unos ocho a manos de colonos israelíes, desde que se intensificó la violencia en la zona tras el ataque de Hamás a Israel desde Gaza.
También murieron dos soldados israelíes.
El ejército israelí ha informado de un fuerte aumento de las operaciones contra milicianos en Cisjordania desde el ataque del 7 de octubre, realizando unas 1.260 detenciones, de las cuales unas 760, dijo, estaban afiliadas a Hamás.
El recrudecimiento de la violencia en Cisjordania ha avivado la preocupación de que el territorio palestino pueda convertirse en un tercer frente de una guerra más amplia, además de la frontera norte de Israel, donde han aumentado los enfrentamientos con las fuerzas libanesas de Hezbolá.
Aunque Hamás y el grupo miliciano más pequeño Yihad Islámica, respaldado por Irán, tienen su base principal en Gaza, en los últimos años también han ampliado su presencia en Cisjordania, sobre todo en ciudades tan inestables como Yenín y Nablus.
Throssell afirmó que las fuerzas israelíes utilizan cada vez más tácticas y armas militares en las operaciones policiales, mientras que la violencia de los colonos contra los habitantes palestinos, que ya alcanzaba niveles récord, se ha “intensificado drásticamente”.
“Hemos documentado que en muchos de estos incidentes, los colonos iban acompañados por miembros de las fuerzas israelíes, o los colonos vestían uniformes y llevaban rifles del ejército”, afirmó.
“Junto con la impunidad casi total de la violencia de los colonos, nos preocupa que los colonos armados hayan actuado con la aquiescencia y colaboración de las fuerzas y autoridades israelíes”.
Ammar Al-Dwaik, director general de la Comisión Independiente de Derechos Humanos de Palestina en Ramallah, sede de la limitada autoridad palestina de autogobierno en Cisjordania, dijo que muchas personas tenían miedo de aventurarse lejos de sus hogares.
“Vemos cada vez más soldados por todas partes. El trato del ejército israelí a la gente es cada vez más agresivo y humillante”, dijo a la prensa en Ginebra por videoconferencia.