El Triángulo de las Bermudas es un área geográfica que está situada en el Océano Atlántico, entre las islas Bermudas, Puerto Rico y Miami. Estos tres puntos forman un objeto geométrico que, con el tiempo, generó mucha incertidumbre debido a la desaparición de barcos. A raíz de esto, el lugar se hizo de una imagen tétrica y fue motivo para que los investigadores se aventuren en saber el porqué de su origen.
En principio, los especialistas marcaron que las “consideraciones ambientales” podrían explicar varias de las desapariciones que se registraron en el último tiempo. Un ejemplo de ello son la mayoría de las tormentas tropicales y otras adversidades climáticas causantes de desestabilizar el rumbo de las embarcaciones que navegan por esa zona.
“No hay evidencia de que las desapariciones misteriosas ocurran con mayor frecuencia en el Triángulo de las Bermudas que en cualquier otra área grande y bien transitada del océano”, explicó la organización National Ocean Service (NOAA) en un comunicado que se publicó en su página web y dio pie a que otros profesionales de la materia empiecen a indagar si existía algún factor -además del climático- que atente contra las embarcaciones o barcos pesqueros de la zona.
Años más tarde de esta aseveración de un sitio oficial que se especializa en los movimientos del océano, el científico australiano Karl Kruszelnicki aclaró en diálogo con The Independent que no existe ninguna razón para creer que el Triángulo de las Bermudas esté asociado a los eventos trágicos.
“El número de barcos y aviones que desaparecen en el Triángulo de las Bermudas es el mismo que en cualquier parte del mundo en términos porcentuales”, precisó.
En esa misma línea, defendió su postura a ultranza: “Según datos de Lloyd’s de Londres y la Guardia Costera de los Estados Unidos, el número de desapariciones en el Triángulo de las Bermudas es similar al de cualquier otra parte del mundo en términos numéricos”.
A pesar de no encontrar una razón específica que pueda determinar el principal motivo de la desaparición de barcos en esta zona, el NOAA se basó en los factores ambientales para buscarle un motivo.
En primer lugar, se posicionó en la “influencia de la Corriente del Golfo”, la cual experimenta cambios climáticos bruscos en el Golfo de México y eso ocasiona que el peligro aumente considerablemente para las embarcaciones. Otro punto importante es la existencia de numerosas islas en el Mar Caribe que “dificultan la navegación” por el poco espacio marítimo que existe.
Por último, y no menos importante, esta organización pone al Triángulo de las Bermudas como un posible obstáculo de las “brújulas magnéticas” y argumentó este razonamiento: “Hacen que apunten al norte verdadero en lugar del norte magnético, generando así la confusión en la orientación”.
Con todas estas evidencias puestas sobre la mesa, el Triángulo de las Bermudas aún es un motivo de observación para los especialistas en el tema que aún no dan en la tecla para entender el enigma que lo rodea.