REPORTERO1 
Las autoridades parisinas ya investigan este ataque como una agresión motivada por el racismo, aunque aún no definen una causa concreta del tiroteo que sucedió —casi al mediodía— en el centro cultural kurdo Ahmet Kaya, ubicado en la calle d’Enghien en el centro de París, Francia.
Lamentablemente, este tiroteo —que sorprendió a París a dos días de Navidad— dejó como saldo al menos tres personas muertas y cuatro heridas (entre ellas el atacante), de acuerdo al reporte que dio la fiscal Laure Beccuau.
De acuerdo con RFI y medios locales, el atacante tiene antecedentes de agresiones contra un campamento de migrantes —con un sable en 2021— y dos intentos de homicidio.
Esta es la información que ha circulado desde hace un par de horas entre medios locales, a la par de la confirmación que hizo la Policía de París: la detención del presunto atacante, un hombre adulto mayor que tuvo que ser llevado al hospital, pero como detenido.
Mientras, si bien las autoridades aún no dan información sobre las causas de este tiroteo, la Fiscalía de París abrió una investigación por los delitos de asesinato, homicidio voluntario y violencia agravada —y lo que les comentamos al inicio de esta nota, que las investigaciones giran en torno a los discursos racistas y de extrema derecha.
“La comunidad kurda y, a través de ella, todos los parisinos, fue blanco de estos asesinatos cometidos por un activista de extrema derecha. Los kurdos, donde quiera que residan, deben poder vivir en paz y seguridad. Más que nunca, París está a su lado en estas horas oscuras”.
Por su parte, la alcaldesa de París Anne Hidalgo publicó un mensaje en redes sociales para condenar de manera directa el ataque hacia la comunidad kurda —uno de los grupos étnicos con mayor presencia en Medio Oriente, que no tiene un Estado, si no que está disperso en Turquía, Siria, Irak, Irán, Armenia y varios países europeos y que precisamente ha tenido enfrentamientos por el reclamo territorial.
De hecho, en el mensaje, Hidalgo señaló al atacante como un integrante de la extrema derecha —y este aspecto ha sido enfatizado por varias personas en Twitter, que han externado además su preocupación por el crecimiento de los discursos de odio, discriminación y racismo en París y Francia.
