A seis meses de los asesinatos de los sacerdotes Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar, perpetrados en el templo del poblado Cerocahui, municipio de Urique, la comunidad jesuita de la Sierra Tarahumara exigió a los tres niveles de gobierno que se revise la estrategia de seguridad pública en la región, pues no han detenido al responsable.
Asimismo, anunciaron que este martes se celebrarán misas en templos católicos de la capital de Chihuahua, en Juárez y la Ciudad de México para recordar los homicidios de los clérigos, presuntamente cometidos por José Noriel Portillo Gil, El Chueco.
El supuesto asesino es identificado como líder de una célula del grupo criminal Gente Nueva, brazo armado y operativo del cártel de Sinaloa en Chihuahua, que trabaja para la organización Los Salazar, a la cual se atribuye la autoría intelectual del homicidio de Miroslava Breach Velducea, corresponsal de La Jornada, perpetrado en marzo de 2017.
En un comunicado, los jesuitas pidieron verdad y justicia por los asesinatos de Javier Campos y Joaquín Mora, del guía de turistas Pedro Palma y del joven Paul Osvaldo Berrelleza. “A la fecha no hemos encontrado la prometida justicia pronta. Reconocemos los esfuerzos, pero condenamos la vergonzosa impunidad que se vive ante estos y miles de homicidios más”.
Indicaron que “muchos pueblos como el de Cerocahui ya no quieren vivir con miedo e incertidumbre. La paz sólo será posible en la medida en que haya una justicia expedita y real. La indiferencia y el silencio no son una opción, y las muertes piden ser escuchadas”.
Los integrantes de la Compañía de Jesús solicitaron que “se adopten todas las medidas de protección para salvaguardar los derechos de las víctimas, pues continúan los asesinatos, las extorsiones, la tala clandestina y los desplazamientos forzados en la Sierra Tarahumara”.
Asimismo, demandaron “evaluar la situación de seguridad de Cerocahui y todo el municipio de Urique, y diseñar un plan de restablecimiento de las condiciones de paz a largo plazo, que implique garantizar el buen ejercicio de la función pública y la coordinación interinstitucional. Queremos respuestas estructurales a problemas estructurales”.
Recordaron que “nuestros hermanos jesuitas donaron la vida hasta el final; fueron asesinados sirviendo. Se llevaron sus vidas, pero nos dejaron la memoria para resistir, la fuerza para seguir caminando en la Sierra y la dignidad para seguir hermanándonos con otras y otros”.
Advirtieron que continuarán “levantando nuestra voz para exigir justicia; optamos por la memoria y resistiremos junto con el pueblo rarámuri y mestizo. La realidad actual de violencia visibilizada por estos homicidios no es una novedad, y la Sierra Tarahumara atraviesa desde hace muchos años por una situación de inseguridad y violencia que no ha sido atendida de forma adecuada por las autoridades”.
Tiroteo en la Tarahumara deja saldo de cuatro muertos
Un enfrentamiento a tiros entre presuntos narcotraficantes ocurrido la tarde del domingo en los accesos carreteros a la cabecera municipal de Guachochi, en la Sierra Tarahumara, dejó como saldo cuatro personas muertas y siete vehículos confiscados, uno de ellos calcinado, informó ayer el secretario de Gobierno estatal, César Jáuregui Moreno.
La balacera provocó pánico entre lugareños y turistas que transitaban por las carreteras que conducen de Guachochi a Rocheachi, y hacia la barranca Sinforosa.
De acuerdo con la Fiscalía de Chihuahua, elementos de la Agencia Estatal de Investigación y de la Unidad de Servicios Periciales de la Fiscalía de Distrito Zona Sur, con apoyo del Ejército Mexicano, acudieron la tarde del domingo a la vía Guachochi-Rocheachi, donde tomaron nota de un combate entre civiles armados.
La institución mencionó que al llegar al paraje La Virgen se localizaron los cadáveres de tres varones, y en el camino de Guachochi a la Sinforosa, en el lugar llamado Laguna de Ochocachi, fue hallado el cuarto sujeto asesinado.
Ahí, personal de servicios periciales encontró un rifle calibre AR-15, un fusil calibre .223 quemado, 35 casquillos percutidos y 15 cartuchos útiles, así como siete camionetas, una de ellas calcinada y dos reportadas como robadas en la ciudad Chihuahua.
El diputado local por el distrito 22, con sede en Guachochi, Noel Chávez Velázquez, advirtió que “hay alerta fuerte por las fechas que se acercan; en diciembre viene gente de otras ciudades y de Estados Unidos que va a su pueblo, Guachochi” y podrían sufrir asaltos, como sucedió hace unos días a familias migrantes en Zacatecas.