Francia ganó a Dinamarca en el segundo partido del Grupo D porque tiene a Mbappé, el delantero que quiere dejar su firma definitiva en el Mundial.
Kylian marcó los dos tantos de su equipo: el primero tras una jugada con Theo y el segundo, con la rodilla, casi en la línea de gol, tras un pase de Griezmann, el hombre que lo hace todo en Francia.
Dinamarca presentó batalla y resistió las embestidas de un equipo diseñado para ser campeón. En la segunda mitad los daneses se crecieron, empataron el choque y tuvieron unos minutos para pensar con hecho que podían ganar.
Pero no pudieron parar a Mbappé y su colmillo y su ambición. Juega contra los rivales y contra Messi y Neymar. Quiere ser el mejor. Le va todo en ello.