El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo el martes que habrá “consecuencias” para Arabia Saudí, después de que la OPEP+ anunciara un recorte en su producción de petróleo y algunos legisladores demócratas pidieran que se congele la cooperación con los saudíes.
Biden sugirió que tomaría medidas pronto y sus asesores anunciaron que el gobierno revisaba su relación con el reino árabe dado el descenso de producción petrolera, que según funcionarios de la Casa Blanca ayudaría a otro miembro de la OPEP+, Rusia, a reforzar sus ingresos tras casi ocho meses de guerra en Ucrania.
El senador demócrata Richard Blumenthal y el representante demócrata Ro Khanna presentaron el martes una iniciativa de ley que suspendería inmediatamente todas las ventas de armas de Estados Unidos a Arabia Saudí durante un año. Esta pausa también detendría las ventas de piezas de repuesto, así como los servicios de asistencia y el apoyo logístico.
Pero está por verse hasta dónde está dispuesto a llegar Biden para mostrar su descontento con los saudíes, un aliado fundamental pero complicado en Oriente Medio.
En una entrevista en CNN, Biden dijo que consultaría con el Congreso sobre los próximos pasos, pero no llegó a respaldar la propuesta de los legisladores demócratas de congelar la venta de armas.
“Habrá consecuencias por lo que han hecho, con Rusia”, dijo Biden. “No voy a entrar en detalles de lo que yo consideraría y lo que tengo en mente. Pero habrá consecuencias”.