La Secretaria de Desarrollo Rural (SDR), a través de la Dirección de Desarrollo Forestal y el Departamento de Conservación y Restauración Forestal, informó que gracias a la labor de personal especialista y brigadistas que combaten los incendios forestales, se ha logrado sofocar 7 de los 10 incendios que se tenían activos en el estado al 20 de mayo, que afectaban un área preliminar de 9 mil 315 hectáreas.
Según datos de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), para este día 25 de mayo están activos solo tres de estos siniestros, que afectan un área preliminar de 71 hectáreas en los municipios de Guadalupe y Calvo, Casas Grandes y en Bocoyna, los cuales están en un 40, 85 y 10% bajo control así como en un 30, 60% y 5 por ciento de liquidación, respectivamente.
El combate efectivo se realiza gracias a que la dependencia estatal cuenta con 3 técnicos especialistas en el manejo del fuego, con capacitación básica y especializada, así como personal que integra 13 Brigadas para combatir este tipo de siniestros, con entrenamiento en “Brigadas Helitransportadas” para realizar labores de combate con equipo aéreo para transporte de personal y descargas de agua; además del apoyo y coordinación que se tiene entre los tres niveles de Gobierno y personas voluntarias.
A este personal se le dota del equipo de protección personal, herramientas manuales y equipo menor especializado para el desarrollo de sus funciones. Por otra parte, se asegura la movilidad con 13 camionetas pick up, un camión 3 toneladas y 2 automóviles de ataque rápido.
Estas brigadas se encuentran distribuidas estratégicamente en las zonas prioritarias donde se registran la mayor cantidad de incendios forestales, con el propósito de dar respuesta oportuna a estos desastres.
Existen en la entidad otros grupos particulares de empresas u organismos de los gobiernos federal y municipales, que tienen experiencia y los conocimientos necesarios para apoyar esta labor, por lo que son los únicos que están facultados para intervenir.
En caso de ser necesario, también brindan asesoría y supervisión a las personas voluntarias que se acercan para brindar ayuda, pero que carecen de preparación profesional, esto a fin de salvaguardar su integridad física y evitar errores, manteniéndolos siempre a la vista y asignándoles funciones que contribuyan a controlar o sofocar el incendio, pero que no representen mayor riesgo.
Quienes integran las brigadas son seleccionados con base en su aptitud física y mental y deben aprobar el “Curso Básico del Combatiente Forestal, S-130”, “Preparación del Combatiente Forestal” y “S-190 Introducción al Comportamiento del Fuego”, y trabajar bajo el Sistema de Comando de Incidentes.
Al reconocer la efectividad de la labor que desempeña el personal de brigadistas contratado ya sea de forma permanente o temporal, dependiendo de las necesidades, se destacó además la capacitación y formación que reciben para desempeñar esta tarea, pero sobre todo, su empeño y dedicación para afrontar riesgos y salvaguardar la vida de otras personas, así como las diversas infraestructuras y recursos naturales.