REPORTERO1 
De acuerdo a fuentes internas de la Sader, durante el 2012, en el ejido Nuevo Paraíso fue construida una presa para beneficio de los ejidatarios, cuyo recurso empleado se dividió en aportaciones de gobierno y usuarios, misma que al cabo de un año de su construcción, quedó inoperante por las malas condiciones de trabajo efectuadas; ante esta situación, la Comisión Nacional del Agua, niega la información sobre una posible concesión autorizada para la construcción de dicha presa por la Conaza.
Fue la esperanza para ejidatarios del ejido Nuevo Paraíso, del municipio de Jiménez, el tener por primera vez, agua para poder cultivar y criar ganado. La Presa los Remedios, obra de la Comisión Nacional de Zonas Áridas, al cabo de dos años de su construcción en el 2012, quedó obsoleta, derivado de las fuertes crecientes de agua que corren por los arroyos del desierto de Jiménez, en especial el que desemboca en la presa construida en el ejido Nuevo Paraíso.
De acuerdo a información de fuentes internas de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural [SADER] la obra hidráulica fue construida en el 2012, por un proyecto de la Conaza, al mismo tiempo donde se apoyó a varios ejidos del municipio de Jiménez, con obras similares.
En cuanto al monto total invertido para la realización de dicha obra, las mismas fuentes internas expresan que no se sabe de cuánto fue el monto en términos monetarios, designado para la construcción de la obra hidráulica. Únicamente, que fue mediante aportaciones de gobierno con un 90 por ciento del presupuesto y un diez por ciento por parte de los ejidatarios.
Un ejidatario de la comunidad de Nuevo Paraíso, quien pidió no fuera revelada su identidad, menciona que, durante la construcción de la presa en el año de 2012, a cada uno de los ejidatarios se les pidió una cantidad de 15 mil pesos, por lo cual fue entregada dicha cantidad a una persona representante de la obra.
La presa, que cuenta con muro de contención de 151.88 metros, plancheta de concreto y desfogue de agua, actualmente se encuentra inoperante, ya que las fuertes corrientes de agua rompieron el muro de contención.
“Yo les decía que lo aplanaran, porque nomás le echaron pura tierra, y pues llegó la creciente del arroyo y se llevó la presa, nosotros ya estábamos muy esperanzados de tener agua para los animales y sembrar”, expresan ejidatarios.
Mencionan que lo único que piden es que sea reparada la presa para poder reanudar sus actividades de crianza y siembra, por lo que piden la intervención de Gobierno del Estado para su rehabilitación.
Fuentes internas de la Sader, expresan no saber sobre costos de construcción de la presa, así como si tiene concesión por Conagua.
