Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, España
Entre los encantos de España, lugares como el maravilloso Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido pueden perderse en la mezcla. Con sus lagos glaciares, cascadas, vida silvestre y macizos distintivos, no es de extrañar que fuera uno de los primeros parques nacionales de Europa.
Parque Nacional de Triglav, Eslovenia
El Parque Nacional Triglav no solo alberga el Monte Triglav, el símbolo de Eslovenia, sino que también es uno de los parques nacionales más impresionantes de Europa. Encontrado entre los Alpes Julianos de Eslovenia, el parque nacional es un escaparate sublime de la belleza natural de Eslovenia.
Parque Nacional Hohe Tauern, Austria
En el Parque Nacional Hohe Tauern podrás ver el pico más alto de Austria, el Grossglockner de 3798 metros de altura, además de una vertiginosa variedad de otras montañas monumentales.
Parque Nacional de los Lagos de Plitvice, Croacia
Para los fanáticos de las cascadas, hay pocas cascadas en Europa tan espectaculares como las del Parque Nacional de los Lagos de Plitvice. Ubicado en un cañón en el centro de Croacia, este parque nacional cuenta con los 16 lagos de Plitvice en los que el agua fluye de uno a otro. No solo las cascadas fluyen de un lago a otro, también está la impresionante vista de la cascada Veliki Slap de 78 metros de altura.
Parque Nacional Sarek, Suecia
No hay nada más remoto que el Parque Nacional Sarek en Suecia. Sarek, que se encuentra en Laponia, en el extremo norte de Suecia, es uno de los parques nacionales más hermosos de Europa debido a su épico paisaje casi más grande que la vida. Establecido hace más de un siglo, el parque nacional alberga una rica variedad de vida silvestre en sus montañas, valles, ríos y glaciares.