La Organización Mundial de la Salud insistió a los países con mayores posibilidades económicas que no acaparen todas las vacunas producidas por el coronavirus esto para favorecer a países de menos recursos que todavía no consiguen dosis para sus ciudadanos.
El director de la OMS, Tedros Adhanom recordó los riesgos de no permitir que las vacunas lleguen a todo el planeta pues este error “moral” podría significar la continuidad de la pandemia en países donde no tengan vacunas.
Anteriormente se había indicado este problema donde países “ricos” compraron por adelantado vacunas aún no producidas para abastecerse del medicamento apenas desarrollado.
Esto ocasionó que países con una posición económica menor, al momento de querer comprar vacunas pues fueron informados que no había en existencia y que la producción estaba comprometida con otras naciones.
“Si guardamos las vacunas para nosotros, y si no las compartimos, habrá tres problemas principales: uno, un fracaso moral catastrófico; dos, eso permitirá a la pandemia continuar causando estragos; y tres, una recuperación económica muy lenta”, advirtió Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Según estimaciones de la OMS, de no revertirse esta tendencia llevaría a países “pobres” a acceder a las vacunas hasta 10 años después.